martes, 20 de enero de 2009

Acá, allí

A veces es como si el mundo estuviera dividido en dos. Como si existiera una línea divisoria intangible, pero perceptible al menos desde mi óptica, entre el mundo de los de allí, los de fuera, y el de los de acá, los de dentro. En el mundo de los de allí, la gente camina casi siempre apresuradamente, cogen el autobús o el coche, se dirigen a sus lugares de trabajo, hacen la compra a la salida -entran y salen del supermercado con bolsas en las manos-, piden cita con el logopeda de sus hijos, van a recogerlos al colegio y los llevan a gimnasia o a música, hablan por el móvil, quedan con los amigos para tomar una caña después del trabajo y charlar sobre un nuevo proyecto que tienen entre manos, comentan sobre el nuevo o la nueva que ha entrado en el trabajo -sobre sus jefes, sobre sus compañeros-, organizan una cena en casa durante el fin de semana para celebrar su cumpleaños que fue la semana pasada, van de rebajas, se visten a diario…
Lo veo por la ventana. Casi me marea el trasiego, y me retiro, pero en el fondo siento una especie de “ganas escondidas por la fatiga” de estar al otro lado del cristal. Pienso que desde la otra óptica, la de la vida que transcurre fuera, la sensación no es la misma, la “consciencia” no es la misma. Esta consciencia, la de la línea divisoria intangible, pero perceptible, sólo se adquiere desde esta óptica, al menos de forma lúcida, clara, y más continuada. Y esta óptica no se elige. Nadie te pregunta, claro. Sólo te dan un empujón, y cuando quieres darte cuenta estás ahí. Aquí, acá… Pero pronto empezaré a pasear, tres minutos, cinco, diez, cada día un poquito más. Pero empezaré, y, pasearé. Pasearé.

21 comentarios:

TORO SALVAJE dijo...

Tampoco lo idealices.
Entiendo lo que dices y supongo que el no poder hacerlo todavía hace que sea más atractibo.
En cambio a mí cada me gustan más las burbujas.
Supongo que es una cuestión de experiencias acumuladas.
Ahí afuera no es oro todo lo que reluce, de hecho no creo que apenas haya oro.

Besos.

Sebastian Lineros dijo...

dónde estás?
Estas bién?
Metáfora o reclusión?

Sebastian Lineros dijo...

ahora sé que es reclutamiento forzoso.
Pasearás,de verdad que lo espero.
Aunque no tengo tiempo en estos momentos solo quiero hacerte un comentario.Me sorprendió tu diagnostico porque tu eres mucho más inteligente que eso.

Dulcinea dijo...

por supuesto, no lo dudes.

Y yo contigo.

Un beso.

A.

Anónimo dijo...

Y sin embargo la vida está a ambos lados. Claro que lo que importa, es poder elegir.

Ánimo. Un abrazo.

libertad dijo...

No, no hay que idealizar, no es oro todo lo que reluce, o ni siquiera es oro. Y precisamente para no idealizar he enumerado una serie de actividades cotidianas que no son precisamente las que más me atraen ni con los que más disfruto habitualmente. Yo soy más de intentar pararme. Más de fijarme en los detalles. Aunque, a menudo, cuando estoy "fuera" intento ponerle buena cara a lo que sucede y reírme de lo cotidiano que pueda "aburrirme" o "cansarme", porque he aprendido con el tiempo y la experiencia el valor de lo sencillo, de lo cotidiano. Y he ido sufriendo esta transformación precisamente porque cada día he sido más consciente de mi suerte, de mi inmensa suerte por poder estar en la lado de la vida (aunque sea más o menos atractiva). Luego, sí, si que puede existir, y creo que existe en bastantes casos, esa consciencia de la línea divisoria cuando estás "afuera", pero es una consciencia casi "momentánea", que te hace ser consciente por momentos, que te despierta en instantes concretos, pero nunca la perspectiva es la misma, no me parece que sea continuada, por mucha consciencia que uno crea tener, hasta que no estás en la otra parte. Y aunque la vida sea el acá y el allí, las dos cosas, el mundo de las posibilidades (al menos tal y como yo lo veo ahora) está fuera. Aunque insisto, yo tendré paciencia y confiaré siempre en volver a estar bien, porque jamás renunciaré a las posibilidades de lo bello, de lo cálido, de lo amable, y de lo amado.

P.D. Perdonad, esta mañana tenía la sensación de que no me había explicado bien, y quería hacerlo (mira, eso está bien, tenía ganas)

Besos, gracias

Fernando dijo...

saldrás siguiendo la fuerza de tu nombre...besos.

cristal00k dijo...

Un placer leerte de nuevo. En ná, estaras al otro lado del cristal.
En todo caso, lo importante es "estar", lo que es primer paso para poder escoger... lo que sea.
Besos.

Edanmir dijo...

Por lo menos cuando apareces aquí, en el blog, borras un poco la frontera del acá, allí..Salu2

Melpómene dijo...

Tú puedes estar en todas partes porque tienes un mundo propio. Pasito a pasito. Un besazo

cristal00k dijo...

Paso dejarte toda la energía que pueda. Y un beso grande.

esperanza dijo...

A veces allí, a veces acá. Y lo interesante de traer cosas de fuera hacia dentro y sacar cosas desde lo íntimo para ponerlas donde puedan ser útiles.

Y algunas veces, ni aquí ni allá, porque las fronteras son frágiles y artificiales, especialmente en cuestiones de salud. Curarás, si te siguen acompañando las ganas de hacerlo. Nadie te preguntó, porque nadie elige el sufrimiento ni el dolor ni el miedo como rutina ni como objetivo, pero es un camino...de baldosas amarillas, como el del Mago de Oz. Te deseo que pronto pasees, como deseas tú. Cálzate los escarpines rojos, estáte atenta mientras caminas y comparte con los que te encuentres (aunque seas tú misma al otro lado del espejo). Todo es posible en los cuentos.
Cualquier día que no sabemos, y no te avisarán, alcanzarás el lugar seguro que ahora echas a faltar (sin empujones). Y desde ese lugar seguro, espero que nos sigas saludando.
Un besazo, muy fuerte.

P.D. La foto de mi blog (la que hay ahora), está hecha en el Cabo de Buena Esperanza (antes de Las Tormentas), donde se encuentran los oceános, sin frontera ni trazado divisorio...es sobrecogedor y conmovedor.
Otro beso.

Anónimo dijo...

Espero que pronto desaparezca ese cristal para ti y que seas muy feliz.
Un saludo

manuel_h dijo...

ánimo, y pasearás!!!

besos

Anónimo dijo...

Te entiendo perfectamente. Y es verdad, al menos para mí, que esa consciencia, si es que existe, no es tan continuada fuera.
Un beso y ánimo

Antonio Martín Bardán dijo...

Hola, Libertad.
Descubro ahora tu blog (vengo de La Mirada de Cristal), y me atrevo a dejarte un breve comentario. Hoy me siento valiente.
Bueno, sólo apuntar que para mí es un privilegio ese estar en el otro lado del cristal, desde donde se ve la vida normal casi como si fuera una antigua película de cine cómico.
Yo intento siempre estar lo más posible en ese 'otro lado'.

Si me lo permites, te agrego a mi lista. Me gusta como escribes y, sobre todo, de qué escribes.

Un saludo.

Sirena Varada dijo...

Libertad, me dices que vas mejorando y me llevo una enorme alegría al saberlo.

Le preguntaron a uno de mis poetas favoritos ¿Qué vale la pena?:
"Vale la pena seguir vivo, seguir luchando, aunque sea por uno mismo. Yo me moriré vivo"
Sin comentarios ¿verdad?

Un abrazo grande grande

Antonio Martín Bardán dijo...

Perdona, Libertad.
Después de leer el último comentario, de Sirena Varada, me parece que he metido la pata. No tenía ni idea de que tuvieras algún problema de salud. Eso me pasa por no leer más atentamente; yo pensaba en otra cosa...

Que te mejores, Libertad. Seguiré viniendo, porque es cierto lo que dije, de que me gusta como escribes.

Antonio

libertad dijo...

No hay nada que perdonar. Gracias por tus comentarios Antonio. Bs

momo dijo...

y por esa delgada linea vengo ...
me gustará verte pasear, y seguro que te acompaño porque no hay nada mejor ni más provechoso que llevar un compañero de camino como tú.
Milesdebesos

JUANAN URKIJO dijo...

Yo me siento en retroceso, lento y sereno. Aún permeabilizo mucho, pero me siento a gusto también en este lado donde todo fluye sin ajetreos. Tal vez sea cuestión del momento vital por el que uno atraviesa... Pero te entiendo bien; muy bien.

Un beso.