miércoles, 4 de junio de 2008

Algo sobre "The kite Runner”

Tengo grabada la cara del niño. Agazapado, atemorizado, angustiado, inmóvil. Como el que prefiere ni oír ni ver, aunque esté oyendo y viendo, porque es mejor no saber y porque va a ser para nada. Como oprimido o constreñido por sí mismo, sin remedio y pese a todo. …

(…A menudo he creído que la mayor parte de los libros en los que se inspiran películas de cine las superan. Generalmente, a mi juicio, reflejan de una manera mucho más precisa la realidad, la historia, los sentimientos o las emociones que quieren transmitir, entre otras cosas. Es el poder de la palabra. De la palabra certera y adecuada. Pero, sin embargo, también hay algo misterioso o mágico en las instantáneas que percibe directamente nuestra retina, porque más allá de lo que son capaces de provocarnos o de cuál sea la intención que quiere transmitirnos quien la coloca en nuestro punto de mira – como es el caso de una imagen o una foto insertada en una película-, una misma imagen puede ser objeto de múltiples interpretaciones. Casi tantas como ojos que la miren. Es como si “la traducción” propia de algo que nos llega estuviera menos acotada, pudiera ser algo más libre…)

…Y tengo aún más grabada su actitud ante lo que no quiere o puede enfrentarse, ante lo que le recuerda lo que hizo, o más bien, lo que no hizo, cómo “huye hacia delante” haciendo desaparecer de su vida al que era “su amigo”, al que le sujetaba el carrete de hilo de la cometa en sus juegos, por dejar de sentirse amenazado, por dejar de sentirse mal o a disgusto, por olvidar lo pasado, por darle la espalda como si no hubiera sucedido...Pero era sólo un niño… O quizás, quiero creer, que porque era sólo un niño, y la realidad le sobrevino, lo desbordó… Sin embargo, no puedo evitar pensar en la condición humana, en cómo el miedo a no saber qué hacer en una determinada circunstancia, o el miedo a comprometernos o a implicarnos con (en) algo o alguien, nos puede llevar a la cobardía, a una espiral de actos y actitudes cobardes. Y esto, la cobardía, ya no estoy tan segura de que forme parte de la condición humana...

14 comentarios:

libertad dijo...

"The Kite Runner", traducida al español "Cometas en el cielo". Película del director Marc Foster, basada en el libro de Khaled Hosseini.

UMA dijo...

Gracias por la data, intentarè verla.
En cuanto a la cobardìa como un algo inherente al ser, tambièn lo pongo en duda, es todo un tema que siempre me ronda, porque si bien tengo la certeza de que como seres humanos somos seres "condicionados", no estamos "determinados".
Ya siendo adultos, uno deberìa ser capaz de asumir responsabilidades, por ende, hacerse cargo de sus miedos, enfrentarse a uno mismo, y para ello hay infinitas vìas y no sòlo mirarse al espejo cada mañana...
Es que mirarse a uno mismo no es tarea fàcil, pero se puede asegurar que es fecundo, provechoso, beneficioso, y ademàs productivo.
Muy buen post, como siempre.
Un besazo, Liber.

Churra dijo...

Pues fijate que yo creo que la cobardia tamien es parte de la condición humana , que sale directamente del miedo que es un sentimiento primitivo y animal. Quizas lo que si sea mas humanoide es la capacidad de superarla, las heroicidades no son mas que picos de superación de la cobardia algo incoscientes ....
(Hoy estoy muy filosofica , jajajaj)
Apunto la pelicula, eso si esperaré a tener el animo propicio para no comerme mucho el coco.
Un beso

Di Verso dijo...

Yo tambien creo que la cobardía, o el miedo, forma parte de la condición humana.
Probablemente en la selva marcase la diferencia entre la vida y la muerte. Tal como han evolucionado en muy poco tiempo las relaciones humanas me parece más bien una rémora, un lastre a arrastrar por nuestras vidas. Al menos con su funcionamiento actual.

Saludos.

Anónimo dijo...

Los seres humanos somos libres, no cobardes. La cobardía es una elección. Interesante post.
Muchos besos.

momo dijo...

Que razón tienes en ocasiones nos bloqueamos y no sabemos para donde tirar ...hace poco puse una entrad sobre la peli y el libro. Me gusta mucho leerte, cuentas esas cosas que todos tenemos en nuesttras verdades y mentiras diarias, en nuestras luces y sombras .... es muy apropiado el titulo.
Te veo a la vuelta guapa

ferfo dijo...

Uno sopesa y elige ante cualquier circunstancia, es la ley de la supervicencia, por lo tanto, condición humana. El problema viene cuando rememoramos aquello que decidimos y surge el arrepentimiento por falta de aceptación. Aunque esto también debe ser condición humna. Por desgracia.

Ya estoy bajando la peli ;)

Besos

Anónimo dijo...

Me gusta esa mezcla de lo que nos cuentas y lo que te cuentas a ti, en esos largos paréntesis (son como tus notas a pie de página cuando escribes de otras cosas)
Un besazo

Amelie dijo...

No he visto aún la película pero quiero verla.

Respecto a la cobardía, pues no sé qué decirte, supongo que una cosa es el instinto de supervivencia, que todos tenemos, y creo que sí es innato no sólo en el ser humano sino en todas las especies. Y otra la cobardía, el miedo que te paraliza y no te permite avanzar ni hacer nada. Esto último supongo que depende de cada persona, pues hay gente muy lanzada y otros en cambio muy cobardes, de todo hay.

Me gusta tu blog.

Un beso.

Clarice Baricco dijo...

Me gustò mucho la pelìcula. El libro aùn no lo leo.
Cuànto nos estremece lo que de momento se nos hace imposible.

Recibe abrazos

libertad dijo...

Hoy, estoy segura de que sí, aunque no es lo que me gustaría.
Gracias a todos por vuestras reflexiones.
Besos y abrazos

Anónimo dijo...

Me encantó.
Besos

Simplemente Olimpia. dijo...

Ya te dije lo que pensé entonces...quizá como tú cambiaría mi decisión...
Por eso mismo, por esa adaptación continua...quizá fui, soy o seré cobarde,...no lo sé...ciertamente debo reflexionar sobre ello. Pero tengo claro que la cobardía de ayer, no será la de mañana, ni la de hoy.
Y que tenr miedo, no es ser cobarde...el miedo es intrínseco al hombre, lo define, lo completa,,,pero la cobardía es otra cosa.
Nada tiene que ver con el miedo, por mucho que así lo creamos...el miedo es causa, no, hecho.
La cobardía, puede ser el silencio de un acto, su omisión, incluso su traición...y su excusa.
NO se es cobarde por sentir miedo, se es cobarde por no admitirlo y querrer creer que no existe. El héroe también siente miedo.
La cobardía es la excusa de quien no quiere saberse y se ciega así mismo.

Contigo mis besos, todos, los valerosos y los otros.

Olimpia

libertad dijo...

Tú eres valiente, querida Olimpia. Muy valiente. Un beso fuerte. Contigo